La poetisa argentina Graciela Maturo murió el miércoles, a los 96 años. La noticia la confirmó su hija, Mercedes Sola, a través de un posteo en las redes. Había acompañado en las últimas horas a su madre en una entrega de premios de la Fundación Konex, que reconoció a Maturo en la categoría Ensayo Literario.
Maturo fue una de las escritoras que recibieron el martes el Diploma al Mérito en Letras, por la década 2014-2023, en la Fundación Konex. Lo hizo en la categoría Ensayo Literario.
Según recordaron desde la institución, su hija la había acompañado a la cita y había subido para recoger el diploma. «Está en la sala», aclaró Mercedes desde el escenario. «La aplaudimos bien fuerte», pidió Silvina Chediek, conductora del evento. Sin embargo, el miércoles por la noche, Mercedes comunicó el fallecimiento de su madre.
«Hoy 11 de septiembre tomó otro vuelo mi madre Graciela. A sus 96 años se despidió de su familia y amigos en paz», escribió en la cuenta de Facebook de Maturo.
Por su parte, desde la Fundación Konex sostuvieron: «Lamentamos profundamente el fallecimiento de Graciela Maturo, quién fue galardonada este año con el Premio Konex 2024 en la disciplina Ensayo Literario, y quien nos acompañó el martes junto a su hija para recibir su Diploma».
Maturo nació en Santa Fe el 15 de agosto de 1928. Su obra transitó los caminos de la poesía y del ensayo literario, en una carrera marcada por la investigación. Era Doctora en Letras por la Universidad del Salvador. Fue profesora universitaria, ámbito en el que fundó centros de estudio -el más reconocido, el Centro de Estudios Latinoamericanos, en 1970- y en el que dictó numerosas conferencias en todo el mundo.
Como poetisa, integró varias antologías argentinas. Su obra poética 1958-2007 fue publicada por la Universidad Católica Cecilio Acosta de Maracaibo, en 2009.
El premio que recibió el martes fue por su labor ensayística. En la última década publicó La poesía. Un pensamiento auroral (2014); Cortázar: razón y revelación (2014); El surrealismo en la poesía argentina (2015); La identidad latinoamericana (2019); América, lugar de la poesía (2021); La identidad latinoamericana, problemas y destino de una comunidad (2023); y Ruy Díaz de Guzmán, defensor de la identidad indiana (2024).
La condecoraron con numerosos reconocimientos a lo largo de su vida, entre ellos el Gran Premio de Honor de la SADE, de 2007; el de Personalidad Sobresaliente de la Academia Argentina de Letras en 2019; y Kakiu Penn Warren al mejor poeta extranjero en China 2020.
Las 26 cartas con su amigo Cortázar y su concepción de la poesía
En sus inicios estudió la obra de Julio Cortázar, a quien había leído siendo muy joven. Comenzó una relación epistolar cuando el autor de Bestiario vivía en París. Ese vínculo luego se prolongó de manera presencial. Según recordaba en una entrevista, el diálogo dejó 36 cartas que fueron recuperadas en un tomo de correspondencia de Cortázar y en la última obra que Maturo publicó sobre él.
«Para mí, Rayuela sigue teniendo plena vigencia. Discrepo de la opinión difundida de que Cortázar ‘cultiva el mito burgués del artista’, frase que suena despectiva e incomprensiva de su mundo», le dijo al poeta Rolando Revagliatti.
También mantuvo amistad con Leopoldo Marechal y Antonio Di Benedetto. Además, Marechal fue el punto de contacto para trabajar otra figura, la de Juan Domingo Perón.
Sobre su propia obra poética, Maturo definió en esa entrevista: «Paralelamente con la vida se desarrolla la poesía, al menos en mi caso. Nunca me he preguntado, para el caso de la poesía, sobre qué voy a escribir, porque la poesía no tiene ‘temas’. Desenvuelve un no-saber, expresa las inquietudes y preocupaciones del alma en el mundo».
Su poesía quedó plasmada en 19 libros, el último de ellos fue el artesanal Orfeo canta, de 2019.