La presencia de la Selección argentina en Miami no pasa desapercibida. No solo porque utilizó esa ciudad estadounidense para reunirse como lo hizo antes de la reciente Copa América, sino porque quedó en medio del desarrollo del huracán Milton, que complica su logística para trasladarse rumbo a Venezuela, su rival del próximo jueves por las Eliminatorias Sudamericanas rumbo al Mundial 2026. «No nos dejaron viajar», confirmó este martes el entrenador Lionel Scaloni, debido a las complicadas condiciones meteorológicas en la ciudad del estado de Florida.
«Estamos todos en alerta. Acá todo se sabe, es muy abierto. Habíamos pedido viajar hoy y no se pudo. Nos denegaron el viaje, vamos a viajar teóricamente mañana (por el miércoles) si el tiempo lo permite. No tengo mucha más noticia que esa. Esperamos entrenar a la mañana y a la tarde nos vamos», empezó Scaloni la conferencia de prensa en el estadio Chase, del Inter Miami.
«¿Y si no se puede despegar? Va a ser difícil llegar el mismo día del partido, porque no se puede ir directo a Maturín (sede del encuentro), tenemos que hacer escala, porque no permiten aterrizar desde el suelo americano directamente a Venezuela. Si tendríamos que salir el jueves va a ser casi imposible llegar. Son cosas que no podemos manejar nosotros», afirmó.
Casi al mismo tiempo que hablaba el entrenador del conjunto albiceleste, el Centro Nacional de Huracanes (NHC) informó que Milton había recuperado la categoría 5 (a última hora del lunes había bajado a 4), lo que implica vientos sumamente peligrosos que pueden causar daños catastróficos, con ráfagas desde 240 km/h.
«Hay que estar pendiente de la seguridad y la salud de la gente, que intenta protegerse, incluso se van de sus casas. Vivirlo de cerca les aseguro que no está bueno. Es algo nuevo y diferente para nosotros, que no estamos acostumbrados. Las noticias no son alentadoras, esperamos que sea todo pasajero y que realmente no tengamos que preocuparnos», completó.
Y en medio de este caos logístico, Scaloni y su cuerpo técnico tienen que preparar un partido importante, porque será el posterior a la derrota ante Colombia, un resultado que no es común en el exitoso ciclo del entrenador. Como si faltaran problemas, las lesiones y suspensiones complicaron la situación, con las convocatorias de urgencia de Facundo Buonanotte y Julio Soler, más la presencia finalmente de Germán Pezzella, tras su microfactura en la mandíbula.
Dybala, Nico González, Acuña y Garnacho se bajaron en diferentes momentos de la semana. Además, Alexis Mac Allister, un puntal del mediocampo de la Scaloneta, llegó a Estados Unidos entre algodones luego de una molestia muscular en la zona inguinal que lo obligó a salir en el entretiempo en el último partido de Liverpool por la Premier League.
«Mac Allister se está entrenando diferenciado. Vamos a ver si llega al primer partido. Por ahora no ha podido entrenar con nosotros y tomaremos la decisión, si es parte de la convocatoria o del banco o juega el jueves. Pero hoy está difícil de que pueda llegar. Sobre todo por el tema del cuidado, creo que lo tenemos que cuidar. Es un chico que viene con mucha carga de partidos. Esperamos no perder a ningún jugador más porque después la situación puede cambiar», sostuvo.
A esas bajas hay que sumar los inconvenientes ya conocidos: la ausencia de Emiliano Martínez por la suspensión de oficio de la FIFA y la imposibilidad de contar con Cristian ‘Cuti’ Romero en el primer partido de la doble fecha por acumulación de amonestaciones.
«Emiliano ya se ha expresado de una manera muy respetuosa, muy correcta. De mi parte como entrenador, son cosas que esperemos que no vuelvan a pasar, sobre todo porque el equipo no se puede permitir no tener al Dibu, no se puede permitir no tener a Cuti Romero, que son jugadores importantes. Eso más allá de que podemos estar de acuerdo o no en la sanción, yo en mi caso no estoy de acuerdo, porque pasan cosas mucho peores y no se sancionan«, analizó.
¿Cómo está Messi? «Leo está bien. Ha jugado varios partidos antes de venir con nosotros. Necesitaba sumar minutos, antes de la anterior convocatoria la decisión era que no venga porque necesitaba jugar. Será parte del equipo. Jugará hasta que él quiera, estaremos pendientes a cuando él decida no jugar más, esperamos que sea lo más tarde posible», dijo.
En ese contexto, casi que descartó algún nuevo citado: «Es una fecha muy difícil. Traer jugadores de Europa es difícil ahora, así que tenemos que aprovechar a los que están en el fútbol argentino. Por ahora estamos bien, numéricamente».
Por último, evitó opinar sobre el conflicto en la Selección de Uruguay dirigida por Marcelo Bielsa, a quien lo une un gran afecto. «Siempre conmigo estuvo bien, pero bueno. No es momento de echar leña al fuego. Ojalá se pueda resolver por el bien de ellos, del fútbol uruguayo, de su selección, porque tenemos grandes amigos y nosotros no somos nadie para opinar», cerró.